Tensa y relaja sistemáticamente grupos musculares, comienza tensando los musculos de los pies hasta la cabeza. Esta técnica te ayuda a reconocer la diferencia entre tensión y relajación. Al tensar los músculos, te haces más consciente de la tensión que estás acumulando. Luego, al relajarlos, experimentas una sensación de alivio y relajación profunda.